Comienzan las épocas de definición de las ligas y, luego de una increíble actuación a lo largo de toda la temporada, el Inter de Milán consiguió sacarle una buena ventaja a sus competidores. Y, con una sufrida victoria en el Derby della Madonnina, los Neroazzurri consiguieron su Scudetto N°20.
Pocas veces un equipo puede hacer historia, pero parece que este era el año para hacerlo. Es que, así como el Bayer Leverkusen rompió su sequía de más de 100 años sin salir campeón en la Bundesliga, el Inter de Milán decidió que el Derby de Milán era un buen momento para salir campeón.
El conjunto dirigido por Filippo Inzaghi llegó al Derby de Milán con un solo objetivo: ganar. Es que, con 14 puntos de ventaja sobre su rival de toda la vida y con cinco partidos por delante, una victoria les aseguraba un nuevo Scudetto. Y, en apenas 18 minutos, un cabezazo de Francesco Acerbi adelantaba a los Neroazzurri.
Pese a que dominaban, apenas en la segunda mitad llegaría el 2-0 que los encaminaría al nuevo campeonato, pues Marcus Thuram soprendió con un derechazo a Mike Maignan y todo el San Siro comenzaba a palpitar la victoria.
Pero, como toda historia épica, la definición no sería nada sencilla, pues Fikayo Tomori descontó y puso en duda la victoria del Inter. Pese a eso, los de Inzaghi aguantaron bien a sus rivales de toda la vida y, con tres expulsiones de por medio, el Inter selló su victoria en el Derby y un nuevo Scudetto.
Vigésimo título y primera consagración en un Derby de Milán
Con esta nueva consagración, el Inter de Milán alcanzó los 20 Scudettos en la Serie A, por lo que suma dos estrellas. Al mismo tiempo, esta es la primera vez en la historia que uno de los dos equipos de Milán consigue consagrarse campeón al ganar el Derby della Madonnina.
