Mike Tyson y Jake Paul se vieron las caras el pasado 15 de noviembre en una de las peleas más esperadas del año; sin embargo, a consideración de muchos, quedó a deber, por lo que ha dado mucho de qué hablar.
Jake Paul se impuso por decisión unánime a Iron Mike, quien volvió al cuadrilátero con 58 años de edad para esta pelea que atrajo millones de miradas en todo el mundo, pero que ahora afronta una demanda.
¿Por qué la pelea entre Mike Tyson y Jake Paul fue demandada?
De acuerdo con la información de The Hollywood Reporter, un residente de Florida se quejó por la transmisión del combate, la cual se dio exclusivamente por Netflix, pero estuvo fallando a nivel mundial, pues por episodios se trababa y la calidad de imagen era mala.
Esta queja se apega a las leyes en Florida, pues incurre en una violación a las leyes de protección al consumidor, razón por la que estaría afrontando la demanda, aunque tocará esperar para ver si hay argumentos válidos, pues de comprobarse Netflix tendría que pagar 15 millones de dólares, aproximadamente.
La fuente señala que la plataforma no es la primera ocasión que afronta este tipo de problemáticas.
Dicho combate se convirtió en el evento deportivo más visto en streaming en la historia, pues atrajo 65 millones de transmisiones simultáneas en vivo y 108 millones de espectadores en vivo en todo el mundo.
“No me arrepiento de haber subido al ring”
Luego de haberse enfrentado ante Jake Paul, la leyenda estadounidense aseguró que aunque no se le vio en su mejor nivel, no se arrepiente de haber aceptado subirse al ring nuevamente.
“Esta es una de esas situaciones en las que perdiste, pero aun así ganaste. Estoy agradecido por lo de anoche. No me arrepiento de haber subido al ring una última vez. Casi muero en junio. Recibí ocho transfusiones de sangre. Perdí la mitad de mi sangre y 25 libras en el hospital y tuve que luchar para recuperar la salud y poder luchar, así que gané”
Mike Tyson