¡Ya se armó el escándalo del Mundial! Fritz Sörgel, un experto en dopaje, le dijo al diario alemán Bild que los jugadores rusos inhalaron amoniaco en sus partidos contra España y Croacia para mejorar su rendimiento. ¡Zaz!

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Todo empezó cuando las cámaras captaron al jugador ruso Golovin con las manos en la masa, digo, en la nariz,  en el medio tiempo. “¡Qué exagerado! Pueden ser mil cosas”, diremos todos. Perooo… De acuerdo al diario Marca, un portavoz de la federación rusa dijo que un futbolista sí inhaló el gas en el partido contra la Furia  Roja.

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Ojalá no sea verdad, porque no solo mancharían su propio Mundial, también a su país y al deporte más hermoso y seguido del mundo. Que quede en un chisme y nada más, por el bien de todos. 

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