Tamara Vega, pentatleta olímpica en Londres 2012 y Río de Janeiro 2016, denunció a su ex entrenador, Sergio N, de pederastia y trata de personas.
“Este es el caso de muchas mujeres, muchas atletas, y ahora me siento muy orgullosa de haberme atrevido a hablar. Quiero que otras personas se den cuenta de que pueden alzar la voz, de que la justicia existe y de que no están solas“, expresó la deportista de 30 años.
“El miedo se ha ido, por eso puedo alzar la voz”
Tamara Vega Arroyos reveló que los abusos por parte de su entrenador comenzaron cuando era menor de edad, cuando dejó su ciudad natal, Ciudad Juárez, Chihuahua, para perseguir el sueño de representar a México en unos Juegos Olímpicos, teniendo que mudarse a la Ciudad de México a una edad temprana.
“El miedo se ha ido, por eso puedo alzar la voz y me enorgullezco de ello. El conocimiento es poder y en este momento me siento empoderada gracias a mis tres abogados, quienes me aseguran que estoy haciendo lo correcto”, agregó.
“Compensar el daño a la víctima”, pide su abogado
El abogado de Vega Arroyos, Jorge Luis Martínez Ocampo, declaró: “Según el análisis de la narrativa de la atleta, se han identificado los delitos de trata de personas y pederastia, y cualquier otro que resulte de la investigación… Lo importante es esclarecer los hechos, eliminar la impunidad, proteger a la inocente y compensar el daño a la víctima“.
Tamara Vega recibió amenazas de su atacante
Tamara Vega también denunció amenazas recibidas y afirmó contar con el respaldo de la Unión Internacional de Pentatlón Moderno, que ha prohibido la participación del presunto agresor en cualquier competencia. Además, obtuvo una orden de restricción en su contra debido a las amenazas de terceros.
“Aquellos que me dicen que debería callarme y dejar de exponer lo que digo, que enfrentaré las consecuencias. Sin embargo, serán consecuencias positivas para mí”, sentenció.