Cristiano Ronaldo no para. Ancelotti, tampoco. Uno y otro han formado un matrimonio que pocos podían creer que daría los frutos que está dando a este Real Madrid. Gracias a esa conexión es capaz de encarar tanto un Clásico como la primera visita liguera a Eibar, que terminó siendo goleado pese a la buena imagen que transmitió en todo momento. Los dos goles de Ronaldo, más los de James y Benzema dibujaron una diferencia excesiva.
Ancelotti representa el sentido común, la cordura, la tranquilidad y el saber aplicar en cada momento la intensidad necesaria. CR7 es el complemento perfecto, el hombre que da ese toque de voracidad y ambición que todo equipo necesita. Y el beneficiado no es otro que un Real Madrid capaz de superar a todo y todos, como bien ha comprobado el Eibar.
Uno y otro han declarado que tanto el delantero como el entrenador son los mejores del mundo y que no se han encontrado a nadie igual en su carrera. La relación va más allá, tal y como quedó demostrado con el gol de Ronaldo, cuando acto seguido el técnico terminó imitando el gesto del delantero ante las risas de todo el banquillo. Comunión total.
El portugués fue decisivo en el partido. En todo momento. Salió hipermotivado y de esa ambición nació el primer gol, con lo que parecía la búsqueda imposible de un balón que se perdía por la línea de fondo y que Ronaldo buscó hasta encontrar, poniendo, acto seguido, el gol en bandeja a James Rodríguez. Tanto precedido de un fuera de juego de Benzema y del propio CR7. Minuto 23 y el partido abierto para los de Ancelotti.
El choque pintaba de blanco, pero a partir de ese momento, la máquina del Madrid se puso en marcha hasta que el partido no quedó cerrado con el tercer gol, ese que nació desde otro ataque de entrega por parte de los jugadores del Real Madrid, en concreto James que la peleó para que Benzema marcara el tercero.
Y es que el equipo de Ancelotti terminó el partido presionando al Eibar. Tal cual. Poco importaba el 0-4 que reflejaba el marcador. Nueve victorias seguidas en Liga, las suficientes para que nadie dude de este Real Madrid.