No juanáticos, no leyeron mal. Özil nos acaba de dar una de las noticias más tristes para el futbol internacional. ¡Renuncia a Alemania! En una carta publicada en redes sociales, Mesut explicó que ha vivido una situación delicada desde que terminó la Copa del Mundo. Junto a su familia fue implicado en temas políticos, sobre todo por cuestiones migratorias.
Nació en Alemania, pero sus padres son turcos, además de que él es musulmán, por lo que muchas veces se le ha querido tachar de inmigrante. Todo se puso peor cuando llegó Reinhard Grindel a la Federación de Futbol.
De acuerdo a Özil, Grindel le había cortado sus vacaciones previas al Mundial para hablar con él y prohibirle hablar en conferencias de prensa. Cuando finalizó el torneo, en búsqueda de un culpable, Grindel lo calificó de alemán no genuino y los medios se le fueron encima, algo que el jugador no soportó.
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— Mesut Özil (@MesutOzil1088) July 22, 2018
Para no hacerles el cuento largo, Mesut explicó que había perdido el orgullo y el cariño a la camiseta de la selección y que tampoco quería representar a un equipo con un presidente que “no es profesional”, rodeado de elementos que lo atacan por ser diferente.
Con toda la pena, apoyado por su DT Joachim Löw, dijo adiós. Al menos hasta que no se sienta discriminado por ser distinto, volverá.
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— Mesut Özil (@MesutOzil1088) July 22, 2018
