Por Alejandro Miranda
Las cosas se pusieron más que interesantes en la Selección Alemana, perdieron contra Austria, pero en la portería hubo un regreso casi triunfal. Manuel Neuer volvió a jugar después de nueve meses de inactividad.
Mandó a Ter Stegen a la banca, impuso autoridad desde que volvió a pisar el pasto para entrenar. Se le notó el interés y sus ganas por jugar, en el calentamiento poco le importó que Zeus estuviera enojado, él seguía dándole duro.
Un regresó amargo por el marcador, pero como siempre, tuvo esas jugadas patentadas, esas atajadas increíbles. Voló como en sus mejores ratos, sus compañeros tuvieron problemas en defensa, pero siempre aparecía en la última zona.
Dejó también una estadística para anotar en la agenda-no queremos decir que la culpa la tuvo Manolito– Austria le ganó por primera ocasión a los teutones desde 1986.
Es más que un hecho que lo veremos en Rusia, estuvo en plenitud con grandes resultados. Joachim Löw tenía la misión de decidir si llevarlo o no después de este juego, sus dudas en el arco están resueltas. ¡El mejor portero del mundo estará en Rusia!