Por Jesús Pelcastre
Las primeras sorpresas comienzan a llegar para mis juanáticos cruzazulinos porque ya pisó tierras aztecas Iván Marcone. Sí, el mismísimo mediocampista procedente de Lanús donde fue 3 veces campeón en su natal Argentina.
Ahora, al estar en nuestro país, se dice estar emocionado por este nuevo reto que representa Cruz Azul; faltan detalles por definir para que su contratación se amarre pero el preferir a Cruz Azul en lugar de Boca Juniors, ya es un gran avance a este traspaso y más por estas razones que lo harán enamorarse de nuestra gloriosa Liga MX
Técnico con carácter
Tendrá la oportunidad de trabajar a lado de uno de los técnicos más importantes del futbol mexicano y que ya fue campeón, Caixinha es un técnico que siempre habla de frente y que tiene una idea futbolística muy sólida. Por eso es que necesita a gente de confianza y experiencia para poder lucir en el campo.
Nuevos Aires
Váyanse haciendo la coperacha y móchense con unos tacos, esa sería la mejor bienvenida que le pueden dar los aficionados de Cruz Azul, recuerden que para nadie es fácil dejar su cantón la primera vez y a lo mejor va a extrañar el dulce de leche y el choripán. Pero sabemos que nuestra gastronomía lo hará enamorarse totalmente de este hermoso país.
Nuevo Director Deportivo
Con alfombra roja y la mesa servida llega Marcone, todo huele a nuevo en su próximo equipo, Peláez se ajusta perfecto tanto a él como a Pedro, por sus triunfos recientes y juntos le pueden quitar la sal que lleva ya varios años.
Reflectores
Esta es una gran oportunidad para que pueda ser visto por muchos equipos, incluyendo la Selección Argentina, es el trampolín de su carrera y el alcanzar el éxito solo dependerá de él, de sus goles y de sus triunfos en Cruz Azul.
Nueva Casa
Aunque el Azteca ya tiene sus añitos encima, para Cruz Azul es casa nueva, si bien en algún tiempo jugaron ahí, el regresar forma parte de un nuevo ciclo, pisar una de las canchas más importantes, con más historia y estar donde Diego Armando Maradona metió gol a los ingleses en el Mundial de México 86 será el mejor motivante para Marcone. Ahora es su turno de escribir su propia historia en el Coloso de Santa Úrsula.