Por Alejandro Miranda
Apenas se anunció lo de Ménez y ya llueven las comparaciones de todo tipo, principalmente con el de Tigres por el hecho de ser compas de la misma nacionalidad. Una cosa está clara Ménez no le va a robar prestigio al Bómboro, el cariño y estilo ya están definidos… Como André-Pierre Gignac no habrá dos en esta liga, es el mejor en todos los sentidos, incluso mejor que Jérémy. Aquí los motivos:
1. No hay nada como la primera vez
Así es chavales ¿O me lo van a negar? La primera vez en lo que sea es algo único e irrepetible, así pasa con estos franceses. Gignac pegó primero, causó mucho más revuelo y ya es el consentido de la liga, lo de Ménez sencillamente es querer igualar o ponerse a la altura.
2. Llegó para ser campeón
El Bómboro llegó para quedarse, su primer torneo fue majestuoso regalándonos goles por aquí y por allá además de ser campeón. Fue el líder felino todo el tiempo y se hacía notar. Ménez tendrá que luchar para ganar la Liga con el Ame en su primera temporada, con un panorama muy difícil.
3. ya tiene el corazón de los mexicanos
Aunque le pese a muchos esta es la realidad. André-Pierre ya tiene el corazón de todos los mexas le vayan a Tigres o no, gracias a su buen futbol, goles y lo que ha llegado a hacer en nuestra Liga. Todos le agradecemos ese talento, amor con el que juega, porque es para el bien de nuestra competencia. Ya tiene un cariño por el país y la gente, se identifica con todo. Jérémy trae ganas y compromiso peeerooo la manera en que sobre explotan su fichaje le va a jugar chueco.
4. Responde con goles
Partido tras partido nos regala goles el felino, no se cansa de romper las redes y traer de sus clientes a muchos equipos. Ya tiene la medida, el tiempo exacto en el cual definir todo. El nuevo no pasará de ser el nuevo hasta que demuestre que no está quemado y viene a marcar apenas tenga chance.
5. Es constante
La clave para un futbolista, nos habla de su nivel y talento para jugar con la bocha. Dédé lo trae bien marcado al ser pocos los equipos con los que jugó en Europa, eso sí, con un gran lapso de tiempo y sin cambios repentinos, lo sigue haciendo aquí en Le Mexique. Con Ménez pueden ser muchos los clubes que presumir y todo, pero nunca mostró constancia, cambiaba de aires a cada rato.