El partido de la jornada 33 de la Premier League entre el Tottenham y el Manchester United comenzó con varios minutos de retraso debido al tráfico londinense, que ocasionó problemas en el traslado del cuadro visitante.
El autobús que transportaba a los jugadores del Manchester United se atascó en el tránsito de las calles de Londres en su recorrido hacia el White Hart Lane, casa de los Spurs.
Si el cuadro dirigido por Mauricio Pochettino planea conservar la segunda posición en la tabla y continuar soñando con arrebatar el liderato al Leicester City, está obligado a imponerse en casa ante los red devils, algo que no sucede desde 2001.