Alejandro Rodríguez consideró que Tigres había ganado la batalla contra Alan Pulido. Hoy, Jaime Castillo, abogado del jugador ve “prácticamente imposible” que FIFA lo castigue sin jugar entre dos y cuatro meses. El conflicto no ha terminado.
Jaime no ve factible que su representado se quede sin participar en el campo por razones extra cancha. Se lo cuenta a TDN. Cree que el organismo entenderá que “no terminó su relación con Tigres por una cuestión de mala fe”. Además estuvo sin jugar varios meses, entre su negativa de estar en México y que el Levadiakos se hizo de sus servicios.
El castigo sólo se daría si Alan hubiera actuado con “un dolo muy notable” o haber incurrido en una situación similar en ocasiones anteriores. Su abogado considera que no está pasando ninguna de las dos cosas.
Tampoco tendrá que pagar multas al organismo. La reprimenda económica será responsabilidad del primer equipo que lo contrato mientras FIFA resolvía el estatus de Alan, en este caso, el Levadiakos. “El jugador rara vez tiene que hacer el pago”, explicó.
Finalmente calificó su llegada a Chivas como “imposible”. Esta institución negoció el movimiento con la oncena regiomontana en lugar de hacerlo con Olympiacos. Cuando el delantero firmó contrato con éste último, su acuerdo con su alma mater se invalidó.