Las entidades presididas por Florentino Pérez y Josep Maria Bartomeu acaparan la mitad de los ingresos y los beneficios que genera la Liga. La LFP presentó esta semana un informe sobre la memoria económica de la campaña 2013-14, donde se desglosan los ingresos de los 20 clubes de Primera División y los 21 de Segunda División. El balance económico disfraza un entorno positivo; las entradas económicas alcanzaron hasta los 2.328 millones de euros, mientras que la deuda total se redujo hasta los 2.757 millones.
Bajo el telón de los números y las cifras está el disfraz de La Liga. Las diferencias entre el Real Madrid y Barcelona en comparación de los otros equipos de la LFP son brutales, no sólo en el campo de juego, sino también en las finanzas. Los blaugranas y merengues vieron crecer con fuerza su facturación en un 8%, la pasada temporada, mientras que los otros 18 clubes se quedaron estancados.
Según informes de El País, los ingresos registrados por los equipos de Primera División fueron de 2.170 millones en la temporada anterior, lo que supondría un incremento de 4.1% con respecto a la campaña 2012-13. Sin embargo, las rebanadas del pastel las acaparan los más grandes, sino los de poder mediático. Real Madrid y al Barcelona ingresaron 1.103,5 millones, un 8,4% más que en la temporada anterior, mientras que el resto de los clubes vieron estancada su facturación.
Los ingresos por derecho de transmisión son los que más impactan, alcanzando los 844,2 millones en la campaña 2013-14, de los cuales, el 45,4% fue a parar a las arcas de blancos y blaugranas.
Real Madrid y Barcelona se han convertido en un gigante de los números, superando por mucho a los 18 equipos que componen La Liga, aunque sus ingresos sólo cubren una cuarta parte de su deuda con las Administraciones Públicas.