Por: Ángel Armando Castellanos
Verano de 2012. Ciudad Universitaria. Distrito Federal. Víctor Mahbub deja la Presidencia del Patronato de Pumas. Junto a él se va Mario Trejo, Director Deportivo del club. En su lugar entra Jorge Borja Navarrete, quien a su vez da el puesto de Trejo a Alberto García Aspe, de pasado brillante como jugador en Pumas, pero con nula experiencia en el cargo.
A partir de ahí Pumas ha sido un desastre. La gestión de Borja Navarrete se define con dos palabras: inestabilidad y fracaso. Cada torneo llegan y se van jugadores y entrenadores. Las modificaciones en la directiva y fuerzas básicas han sido una constante desde el verano de 2012, consecuencias que se ven reflejadas en la falta de continuidad de proyectos debido a la incapacidad de los entrantes y salientes directivos.
De entrada, bajo su mando han desfilado cinco entrenadores: Joaquín del Olmo, Mario Carrillo, Raúl Servín, José Luis Trejo, y Guillermo Vázquez. El único de ellos que dirigió de principio a fin un torneo fue Trejo, durante el Clausura 2014, en el que llevó al equipo a los cuartos de final tras quedar en tercer lugar general.
Siete cambios directivos y de fuerzas básicas
En dos años y medio Pumas ha tenido siete cambios en su directiva y fuerzas básicas. Sin duda, los que más impacto generaron fueron la salida de Guillermo Vázquez Mejía (Padre) de la Coordinación de Fuerzas Básicas en septiembre del año pasado, y las modificaciones en la dirección y/o vicepresidencia deportiva que han tenido como protagonistas a Mario Trejo (en tres ocasiones), Alberto García Aspe, y Antonio Sancho.
La revolución en la directiva llegó con 'Beto' Aspe, quien arribó al equipo para hacerse cargo de la dirección deportiva en 2012. Duró poco más de un año en el cargo. Fue relevado por Mario Trejo, quien había ocupado el puesto desde que el club era dirigido por Arturo Elías Ayub, hasta la salida de Mahbub. Mario dejó el Club poco más de un año después, al anunciar la no renovación de su contrato; el puesto fue ocupado por Antonio Sancho, aún en el cargo.
El problema es que cada directivo impuso sus políticas de fichajes. Mientras García Aspe 'tiró la casa por la ventana', Trejo fue mucho más razonable; y Sancho, en cambio, ha optado por adquirir elementos de bajo costo o a préstamo que puedan ayudar al Club. Esta situación ha generado inestabilidad en el plantel debido a que cada torneo van y vienen jugadores. No se trabaja a mediano y largo plazo. Se piensa en el presente inmediato, lo que se traduce en poco tiempo para el entrenador en turno para buscar resultados que devuelvan la estabilidad a Pumas.
En cuanto a las inferiores, el primer cambio se dio en agosto de 2012 con la llegada de Jorge Valtonrá para ser el Responsable de las Fuerzas Básicas, pero dos años después dejó el Club y llegó José Luis Arce. Junto a Valtonrá se fue Guillermo Vázquez padre, quien había pertenecido a la Institución desde la década de los 90's. Su salida se debió presuntamente a que la directiva no quería que él y su hijo formaran parte del club al mismo tiempo, por lo que con la llegada de Vázquez Herrera a la dirección técnica, Vázquez Mejía tuvo que salir.
Un año después, en 2013, hubo modificaciones que incluyeron a los supervisores de las categorías de 10 años hasta Sub 20, entre quienes estaban los profesores Martín Reyna, Raúl Servín (ex entrenador del primer equipo) y Roberto Hernández (hoy DT del Morelia). Estos dejaron su lugar a Israel López, Christian Ramírez y Humberto González, ex jugadores que salieron de las inferiores auriazules.
45 jugadores manoseados
Los cambios a nivel directivo han tenido consecuencias en el plantel. Desde la llegada de Jorge Borja a la dirección de Pumas, han llegado o salido del club 45 jugadores (22 altas y 23 bajas), es decir, entre seis y siete jugadores llegan o se van por torneo.
Entre los futbolistas extranjeros, destacan los fichajes de Luis García Sanz, Emanuel Villa y Ariel Nahuelpán. Los tres tuvieron actuaciones discretas que los orillaron a salir, además de que resultaron costosos, como Ariel, por el que se pagaron 3.9 millones de euros de acuerdo con el portal Transfermarkt.
También llegaron extranjeros de bajo perfil que no cubrieron las expectativas, como el paraguayo Robin Ramírez, el uruguayo Juan Pablo Rodríguez Conde, y el argentino Diego Lagos. Los tres salieron poco después de haber sido contratados.
Resultados condenatorios
Los constantes cambios directivos, de fuerzas básicas, y de jugadores, han generado pobres resultados para el equipo que hoy es último lugar de la clasificación general. Del Apertura 2012 al Apertura 2014, la liguilla apareció en Ciudad Univeristaria en tres ocasiones, con eliminación en cuartos de final como resultado.
En estos cinco torneos (no se contabiliza el actual) Pumas promedia el noveno lugar como posición en la clasificación. Su mejor ubicación al final de una campaña se dio en el Clausura 2014 ocupando el tercer puesto, mientras que la peor se dio en el Apertura 2013, cuando terminó en el fondo de la tabla general.
Hoy los auriazules, más que soñar con protagonismo, rezan por no seguir cayendo en la tabla porcentual, donde hoy son doceavos y tienen 15 puntos de ventaja sobre Chivas. Cuando Borja Navarrete se hizo cargo del club, éste se ubicaba en el noveno sitio y no corría riesgo alguno de caer al Ascenso Mx, cosa que hoy sí sucede.