Por: Roberto Quintanar
“Nunca den por derrotado a Tom Brady”. Fue una de las últimas expresiones públicas de Leonard Nimoy, uno de los actores más queridos por los amantes de la ciencia ficción, quien falleció esta mañana a la edad de 83 años.
Es un hecho: el personaje Spock nunca hubiese sido tan entrañable (a pesar de su racionalidad característica) de no haber sido interpretado por Nimoy en la serie original Star Trek. Y es probable que la franquicia no hubiera sido exitosa sin él, pues se trata de la primera referencia cuando alguien piensa en ese programa televisivo.
Mr. Spock fue un punto de inflexión para Leonard más allá de los escenarios, pues se hizo más analítico y frío durante la época que interpretó al personaje. Incluso, en su segunda autobiografía, titulada “I'm Spock”, Nimoy afirma que su interpretación le hizo pensar las cosas de una forma que nunca hubiese hecho sin ese papel, aunque siempre supo diferenciar entre realidad y ficción.
A pesar de que la fama le llevó a vivir en Los Ángeles una buena parte de su vida, jamás olvidó sus raíces bostonianas y mantuvo esa conexión emocional con su tierra a través del deporte.
En una charla realizada en la Universidad de Boston, Nimoy rememoró sus vivencias en la ciudad, y lo hizo con inevitables referencias a los Red Sox, los Celtics y los Bruins: “Vi a Ted Williams pegando home runs en Fenway Park. Aprendí a navegar en el río Charles. Vivía a diez minutos del Boston Garden, donde iba a ver a los Celtics, a los Bruins y el circo de los hermanos Ringling”.
Nimoy fue hasta el final de sus días un orgulloso bostoniano. Una última alegría llegó del emparrillado al también fan de los Patriots. La vida le concedió ver la cuarta coronación del rey Tom Brady, alguien en quien confió aun en las difíciles circunstancias del Super Bowl XLIX.