La temporada 2023 de Fórmula 1 arrancó de manera espectacular para el piloto mexicano Sergio Checo Pérez. Con dos victorias en las primeras cuatro carreras, todo apuntaba a que sería un fuerte contendiente para el título mundial, junto a su compañero de equipo, Max Verstappen.
Sin embargo, el deporte motor es impredecible, y el rendimiento de Pérez comenzó a decaer, ampliando la brecha con Verstappen a 177 puntos.
El momento de reflexión de Checo Pérez
El Gran Premio de Miami fue un punto de inflexión para Checo. A pesar de tener la oportunidad de liderar la clasificación, no logró la victoria. Esta situación, sumada a una serie de malas clasificaciones, afectó su confianza y desempeño en la pista. “Después de Miami, las cosas fueron cuesta abajo. Tenía un monoplaza diferente que ya no me iba tan bien“, compartió el piloto tapatío.
¿Qué decisión tomó Checo?
Ante los desafíos en la pista y los rumores sobre su futuro, Checo tomó una decisión crucial: buscar ayuda profesional. Contrató a un entrenador mental para mejorar su bienestar tanto dentro como fuera del circuito.
“Cuando estás pasando por momentos tan difíciles en tu trabajo, es difícil estar alegre en casa con tu esposa y tus hijos“, expresó Pérez, subrayando la importancia de mantener un equilibrio entre la vida profesional y personal.
¿Qué sigue para el piloto mexicano?
Con el apoyo de su coach mental, Checo Pérez ha logrado reencontrar la positividad y la confianza en sí mismo. A pesar de los desafíos, sigue aprendiendo y creciendo tanto en la pista como fuera de ella. Con 33 años, el piloto mexicano se siente rejuvenecido y listo para enfrentar los retos que vienen.
“Me atrevo a decir que ahora estoy de nuevo al 100%. Y también tengo de nuevo la convicción de que puedo tener una oportunidad de pelear por el título el año que viene“, afirmó con determinación.
